En un tiempo en donde parece que lo que priva es hablar del 2012 como si no fuera a existir vida más allá de él, vamos a atrevernos a hacer una pequeña interpretación numérica del olvidado 2013.
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| (Foto: es.123rf.com) |
El próximo año viene marcado por el número 6 (2+0+1+3). El 6 es un número de elecciones, pero elecciones en donde importa muchísimo más conocer las razones del por qué se elige una u otra opción antes que la elección en sí misma.
Basta ver que, si algo nos está enseñando esta galopante crisis que nos está azotando, es que nuestro sistema de valores (que es lo que realmente está en crisis) no sea tal vez un sistema constructivo porque lo único que buscamos es el mero placer y confort propio, anteponiendo así los valores materiales antes que los éticos y morales.
Todos y cada uno de nosotros se vuelca en vivir mejor, e interpretamos como "vivir mejor" el hecho de tener más riquezas, más comodidades, más bienes, cuando tal vez deberíamos plantearnos que "vivir mejor" pueda significar otra cosa.
Aquí es donde entra el número 6, el Arcano de los Enamorados si lo trasladamos al Tarot y equivalente al signo de Géminis si hacemos lo propio con la Astrología: debemos aprender a saber por qué elegimos las cosas que elegimos, que hay detrás de cada elección, que motivos nos llevan a decantarnos por una determinada opción.
El 6, además, nos da otra pista: es un número de servicio, de ayuda, de compromiso. Es posible que el mensaje oculto de este número sea que debemos aprender a pensar más en los demás (lo que incluye el entorno en el que vivimos), en vernos a todos como una unidad, y no entender "unidad" como "yo mismo".
Hacer las cosas sabiendo que el bien que haces a otros repercute directa o indirectamente en ti mismo puede que sea una de las lecciones más hermosas (y más duras) que la Vida puede estar ofreciéndonos-
Ahora, solo nos queda esperar a ver si como colectivo somos capaces de abrir los ojos y ver la maravillosa oportunidad que la Vida nos está brindando, lección que, sea ahora o más tarde, de una u otra forma, acabaremos por comprender.
En nuestra mano está hacer que el camino sea fácil.
¿Y tú?, ¿qué eliges?
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