LA HABITACIÓN OCULTA

 José María Ibáñez

Merrylin Cryptid Museum

El acontecimiento tuvo lugar, presuntamente, en el año 2006. Pero siempre nos quedará la duda sobre el lugar donde realmente se descubrieron los hallazgos tras la puerta sellada del oscuro sótano abandonado. Algunas crónicas apuntan al sótano del ya desaparecido orfanato londinense de Tunbridge otras, por el contrario, lo ubican en el sótano de una mansión ubicada en algún lugar de la capital londinense, también desaparecida en la actualidad.

Dudas al margen, todas las crónicas coinciden que todo empezó cuando unos obreros como previo paso a la demolición, revisan la estructura del edificio y recorren las distintas estancias con el propósito de rescatar muebles y otros objetos de interés. En el sótano, tras derribar una pared de ladrillo, descubren una habitación oculta repleta de cajas de madera selladas que guardaban, al margen de distintos objetos de lo más curioso y misterioso, lo que a primera vista parecen extraños seres sobrenaturales; supuestamente, acababan de descubrir la extraña colección de objetos y criaturas asombrosas de Thomas Merrylin, un aristócrata atraído por la muerte, el ocultismo y lo sobrenatural. 

Actualmente, los hallazgos forman parte de la colección que se exhibe en el Merrylin Cryptid Museum de Londres: vitrinas con restos conservados de supuestos duendes. hadas, demonios, sátiros, dragones, licántropos y algunos artefactos curiosos como una máquina para interrumpir el envejecimiento.

A grandes rasgos, según leemos en la página web oficial del museo, Thomas Merrylin nació en 1782 en Hellingshire, al norte de Londres, en el seno de una rica familia aristocrática. Su madre falleció durante el parto y fue criado por su padre Edward, general del ejército. Estudioso de arqueología y zoología y apasionado por el esoterismo y las ciencias ocultas, viajó a lo largo y ancho del planeta localizando y adquiriendo todo tipo de objetos, plantas y presuntos seres de otros mundos.

En la primavera de 1942, un hombre que se identificó como Thomas Theodore Merrylin se puso en contacto con la dirección del orfanato de Tunbridge. Aquel supuesto Merrylin, que por aquel entonces y según su fecha de nacimiento, tendría ciento setenta años, aunque aparentaba cuarenta, estaba dispuesto a donar su casa de Londres a dicha institución. Las únicas condiciones eran que la casa no debía venderse nunca y que el sótano permaneciera cerrado a cal y canto. Una vez formalizada la operación Merrylin desapareció para siempre sin dejar rastro.

La dirección del orfanato mantuvo su promesa hasta que se hizo necesario demoler la propiedad. Así fue como los trabajadores accedieron  al sótano y descubrieron la habitación oculta que albergaba la extraña colección que actualmente se expone en el Merrylin Cryptid Museum de Londres.

La realidad de los hechos es que se desconoce si realmente fue el propio Merrylin el verdadero autor de los engendros; una mezcla de fragmentos y huesos de distintos animales: aves, roedores, reptiles, perros, gatos y animales de granja, incluso humanos, si hacemos caso a distintos escritos publicados por doquier.

Porque la historia, lejos de aclararse, sigue transitado entre bambalinas. Según parece, Thomas Merrylin nunca ha existido, y tanto el personaje como su historia sería una invención del propietario del museo, Alex CF, escritor, ilustrador, escultor y gran aficionado a la literatura fantástica, de terror y sobrenatural.

¿Es el propio Alex CF el coleccionista y auténtico creador de los engendros? Os invito a seguir tirando de los hilos, aunque, como ya sabemos, en demasiadas ocasiones, la realidad supera a la ficción.

Fuentes:

*lavozdelmuro.net

*www.merrylmuseum.com

*viraldiario.com