José María Ibáñez
William Hope nació en Crewe, Inglaterra, en 1863. De
profesión carpintero, en 1905, al fotografiar a un amigo, en la imagen apareció una figura femenina que el sujeto identificó como su hermana fallecida.
Hope, apodado cariñosamente “el cazador de lo extraño”, fundó
el Crewe Circle (Círculo de Crewe), a principios del siglo XX. Se trataba de un
grupo espiritista que se dedicaba a la práctica de la fotografía espiritual,
una técnica que supuestamente capturaba imágenes de espíritus en placas
fotográficas durante las sesiones espíritas.
Tras la Primera Guerra Mundial su fama creció. Sobre todo, en
personas que buscaban consuelo al haber perdido a familiares, principalmente soldados. Entre sus seguidores estaban figuras de la talla de Arthur Conan
Doyle, creador del mundialmente conocido Sherlock Holmes y el arzobispo Thomas
Colley, una figura intrigante del siglo XIX y principios del XX, conocida por
su participación en el mundo del espiritismo y la investigación psíquica en
Inglaterra. Fue archidiácono de Natal, colonia británica en el sureste de
África, que más tarde entró a formar parte de Sudáfrica, y rector de Stockon,
en Warwickshire, Inglaterra, desde 1901 hasta su muerte en 1912. Su paso por
esta parroquia fue tan peculiar como memorable.
El círculo estaba compuesto, principalmente, por seis fotógrafos espirituales,
liderados por Hope. Su actividad se intensificó tras la Primera Guerra Mundial,
cuando muchas personas buscaban consuelo tras la pérdida de seres queridos. Las
sesiones consistían en fotografiar a personas durante sesiones espiritistas,
con la esperanza de que aparecieran en las imágenes figuras fantasmales.
Aunque muchos no creían en sus habilidades. Hope fue acusado de fraude en varias ocasiones. Investigadores como Harry Price, miembro destacado de la Sociedad para la Investigación Psíquica y Edward Busch, investigador aficionado y escéptico , muy activo en los círculos espiritistas británicos de principios del siglo XX, demostraron que Hope manipulaba sus placas fotográficas, usando técnicas como la doble exposición y la manipulación de negativos. Recordando una famosa trampa, Busch le envió la foto de una persona viva fingiendo que era su hijo fallecido. Hope más tarde presentó, en una de sus sesiones, esa misma imagen como un “espíritu”. A pesar de las numerosas pruebas recogidas en su contra, Hope contó con muchos fieles seguidores hasta su muerte en 1933.
Comentario aparte se merece la Sociedad para la Investigación
Psíquica (en inglés, Society for Psychical Research o SPR) que fue fundada en
1882 en el Reino Unido y es considerada la primera organización académica
dedicada al estudio de fenómenos psíquicos y paranormales. Sus objetivos se
centraban en investigar científicamente experiencias humanas que desafiaban los
modelos científicos tradicionales. Estudiar fenómenos como la telepatía,
mediumnidad, apariciones, casas encantadas, hipnosis y otros eventos, digamos,
inexplicables, y promover un enfoque neutral y riguroso, sin prejuicios ni
creencias impuestas.
Considerado como uno de los primeros fotógrafos de lo
paranormal, y pionero en crear imágenes de lo que podríamos llamar “fake” del
mundo sobrenatural, también fue un artista que supo capturar al imaginario
colectivo de su época. Su trabajo, de alguna manera, refleja el auge del
espiritismo en la Inglaterra de principios del siglo XX, cuando la ciencia y lo
oculto convivían en un terreno ambiguo. Sus imágenes, aunque desacreditadas,
siguen siendo objeto de estudio y, porque no decirlo, fascinación. Si bien es
verdad, nos cuentan, que los miembros del Círculo de Crewe, tras la muerte de su fundador, destruyeron muchos
negativos por temor a ser acusados de brujería.
FUENTES CONSULTADAS:
*Archivo de Historias Olvidadas.
*supercurioso.com
*academia-lab.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario